Tengo la costumbre de redundar cuando hablo de
bajar y subir; suelo decir siempre: bajar para abajo o subir para arriba.
Esta forma de interpretar las bajadas y subidas
por mi parte ha sido un debate continuo durante años con amigos y familiares,
decĂan:
- Repites dos veces lo
mismo, eso estĂĄ mal dicho, es una reiteraciĂłn, ¿acaso se puede bajar para
arriba?…
En fin, toda la vida con el mismo debate. Mas un
dĂa se me ocurriĂł una explicaciĂłn: si bajas en una escalera mecĂĄnica que sube, ¿estĂĄs
bajando para arriba, no?. Depende de la velocidad con la que bajes.
No obstante, ayer oĂ una frase que definitivamente
me da la razón en esta polémica:
“Cuando la vida va cuesta abajo, es cuando mĂĄs
cuesta arriba se te hace”.
En fin, reflexiones de un dĂa cualquiera, os deseo lo mejor.
Foto de mi amiga Toñi DomĂnguez
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