No obligues a nadie a quererte, mejor oblígalo a irse. Quien insista en quedarse, es quien realmente te quiere. Siempre seremos para alguien, la persona correcta que conocieron en el momento equivocado.

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25 enero 2017

NO VALEMOS UN DURO.

Viendo la actuación el otro día de la chirigota del Canijo de Carmona, “No valemos un duro”, evoqué tiempos antiguos y eso me hizo reafirmarme en que el ser humano normalmente no intenta triunfar o destacar por sus méritos, lo hace, muchas veces, desprestigiando a los demás; y la mayoría de esas veces, con mentiras, patrañas, falsos testimonios e importantes trolas para pasarlas boca a boca.
Cuando salieron a la venta los chicles CHEIW JUNIOR, los rosas, traían unos puntitos del mismo color, pero un poco más oscuros, que destacaban en el rosa pálido de la totalidad del chicle.
Se corrió el rumor que eran puntitos de droga para que nos engancháramos a esos chicles, no sé si lo recordáis.
Sería una simple tontería de niños, pero lo que he dicho anteriormente es realmente cierto: “No valemos un duro”, y si no… busca, compara…



07 enero 2017

LA CAPA DEL REY BALTASAR.

Cuando vislumbro la trasera de la carroza del Rey Baltasar me empiezo a sentir mal.
Se apodera de mí una sensación, como la que siento cuando después de ver una buena obra cómica en el teatro, salgo a la calle.
El que está detrás de ti en el semáforo, te pita apresuradamente porqué va muy deprisa a “no sabemos dónde”; la señora que hace dos horas estaba en el portal arropada por mantas raídas y con dos o tres paraguas haciendo de tienda de campaña, sigue ahí; el chico de color que vende pañuelos en el semáforo tapado hasta las orejas, lo sigue haciendo.

Cuando pasa Baltasar, el o la hija de puta, se mantiene; el o la malasangre la sigue teniendo mala, el ratero sigue robando, los que nos hacen la vida imposible siguen en sus trece, y los que no entienden nada, siguen sin entender. En fin, la capa de Baltasar… telón de la comedia romántica que hemos interpretado durante quince días;  pero la vida, después de correrse el telón, vuelve a ser igual. Lástima.