El otro día leí
un artículo en el que un chico le explicaba a unos investigadores de la Nasa
cómo encontrar un día perdido de la historia, buscando en la Biblia. Sin entrar
en enseñanzas religiosas, la Biblia es un libro, que con muchas metáforas,
tiene detalladas las formas en las que se puede presentar la vida, maneras de
reaccionar ante las visicitudes, y te explica cómo puedes actuar ante muchos
momentos de tu existencia. Ayer tarde, estuve hablando con una muy buena amiga, que actualmente está pasando una mala racha; y me
acordé de un consejo que me dio otra buena amiga. En el consejo, me decía, que
ella tenía una cajita donde guardaba los restos de dinero que le iban sobrando
a diario, para echar mano de él cuando no tuviera suficiente.
Le dije a mi amiga, a la que ahora está mal, que las vacas flacas llegan, y se van; y que llegarán las gordas, y cuando las gordas lleguen, hay que guardar, hay que ahorrar, hay que atesorar: sonrisas, buenos momentos, placeres, buenos ratos, besos, abrazos, tiempo con la familia, ratos con los amigos, sueños, viajes, vacaciones, y un largo etcétera del que debemos disfrutar y guardar un poco en la cajita de nuestro corazón. Y cuando regresen las flacas, que vendrán, hacer memoria aunque sea, y disfrutar con los recuerdos.
No hay que desperdiciar ni un segundo de la vida, si podéis vivir ocho días por semana,
Le dije a mi amiga, a la que ahora está mal, que las vacas flacas llegan, y se van; y que llegarán las gordas, y cuando las gordas lleguen, hay que guardar, hay que ahorrar, hay que atesorar: sonrisas, buenos momentos, placeres, buenos ratos, besos, abrazos, tiempo con la familia, ratos con los amigos, sueños, viajes, vacaciones, y un largo etcétera del que debemos disfrutar y guardar un poco en la cajita de nuestro corazón. Y cuando regresen las flacas, que vendrán, hacer memoria aunque sea, y disfrutar con los recuerdos.
No hay que desperdiciar ni un segundo de la vida, si podéis vivir ocho días por semana,
No hay comentarios:
Publicar un comentario