En una profesiĂłn tan denostada muchas veces por defender lo indifendible, uno de sus colegiados ha hecho realmente verdadera esa afirmaciĂłn: ha defendido lo indefendible; y eso, le ha costado la vida.
La mayorĂa de las personas intentamos muchas veces defender lo que no tiene defensa, y no nos preocupamos de defender a quien, o lo que requiera nuestro auxilio.
Que nadie intente colgarse medallas, que ninguno intente pintar este gesto de ningĂșn color, y ni alguno, por muy impresentable que sea, pretenda apuntarse ningĂșn tanto.
Solo su familia y sus amigos tienen el derecho a colgarse la medalla de su recuerdo imperecedero; solo ellos pintarĂĄn su vida de negro luto por su ausencia indefinida; y solo Ăl (en mayĂșsculas), se debe apuntar el tanto de la heroicidad. D.E.P. Ignacio EchevarrĂa.
I NEED A HERO. (Necesito un héroe, todos lo necesitamos.)
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