VACACIONES CON CORAZĂN.
En esta vida una de las cosas que mĂĄs se siente, se padece o se disfruta, o en todo caso se añora, es que la gente haga las cosas de corazĂN.
Y este verano he tenido unas vacaciones con mucho corazĂN.
A primeros de agosto sufrĂ un accidente, quizĂĄs vascular, del que todavĂa no tengo el resultado, en el hotel en el que me hospedaba por unos dĂas.
Fue al dĂa siguiente de empezar las vacaciones de nueve dĂas.
Nos tuvimos que volver al hospital.
Estuvieron atendiéndome durante toda la mañana llamando incluso al 061, me proporcionaron una silla de ruedas con la que estuve moviéndome por el hotel, para ir a la habitación y hasta llegar al coche.
A la hora de pedir la cuenta, no me cobraron los dĂas que previamente tenĂa contratados.
Una vez casi recuperado, hace poco he estado de nuevo en el hotel con corazĂN.
TenĂa que volver para que se evadieran los malos recuerdos y los miedos, sentarme en la misma butaca donde me sentĂ mal la otra vez, pasar cerca de la misma piscina, y disfrutar del aroma que desprenden la recepciĂłn, los pasillos y las habitaciones del HOTEL ON OCEANCONFORT DE MATALASCAĂAS.
Aparte de ser un magnĂfico hotel, con unas vistas espectaculares, atenciĂłn exquisita y buenas viandas, aparte de todo eso, es un hotel en los que los trabajadores tienen un gran CORAZĂN.
Joana y Victoria de recepciĂłn; Javi, socorrista y Juan animador, esos solo son los nombres que conozco, pero todos se comportan igual, con CORAZĂN.
Y también mi recuerdo agradecido a Javier Reina.
En fin, unas vacaciones en dos partes muy definidas en un hotel con mucho, pero que con mucho CORAZĂN. Gracias a todos los trabajadores y trabajadoras del hotel ON OCEANOCONFORT DE MATALASCAĂAS (un hotel con corazĂłn), si la vida asĂ lo quiere, el año prĂłximo espero saludaros de nuevo.
Ahà tenéis la pågina del hotel.
Puesta de sol desde la habitación del HOTEL ON OCEANOCONFORT de Matalascañas. |
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