El cĂĄncer de la humanidad es su falta de memoria.
La enfermedad mĂĄs grande de los seres humanos es la amnesia.
La verdadera pandemia de los pueblos es la desmemoria.
Empezando por casa y terminando por los dirigentes que rigen nuestros destinos.
Te olvidaste de que tus padres te cuidaron, cuando tuviste que tener que cuidar a los tuyos.
Te olvidaste de que te ayudaron tus compañeros y amigos cuando llegĂł la hora de tenerlos que ayudar tĂș.
Se te olvido el daño que te deparaba el bullying que te hacĂan en el colegio, o de novato en el trabajo, cuando llegĂł la hora en que tĂș pudieras ser el que lo inflingiera.
Se te olvidĂł la debacle de Hiroshima y Nagasaky y ya tienes el botĂłn a mano para pulsarlo, hijo de tu madre.
Se olvidan a diario los cientos de miles de personas, y sobre todo, niños, que pierden la vida a causa del hambre sin que hagamos nada por remediarlo.
Nos olvidamos en cada momento de que aquĂ no se queda nadie, y que todos las piezas del ajedrez, de peones a reyes y reinas, todos van a la misma caja.
Se nos olvidaron tantas cosas, tantas cosas, tantas...
Que hasta lamentablemente se no estĂĄ olvidando vivir.
Y eso, conforme va pasando el tiempo, cada vez tiene menos remedio y mĂĄs delito.
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