De la inteligencia artificial, tan de moda ahora, merece la pena que hablemos unas palabritas sobre ella.
La inteligencia es la capacidad de entender, comprender, resolver problemas, habilidad, destreza, experiencia, o bien, sustancia puramente espiritual.
La artificial, con artificio es otra cosa.
Por un lado puede ser: arte, primor, o habilidad con la que se estĂĄ haciendo algo.
Por otro, bien distinto, es un artefacto y por Ășltimo, es: disimulo, cautela o doblez.
Por tanto, la inteligencia artificial puede tener dos caras, dependiendo muy mucho de cómo, quién y para qué se utilice.
Supongo que la inteligencia artificial serĂĄ como todos los descubrimientos que ha habido en nuestra humanidad.
El fuego: Para calentarse, cocinar, y calentar fabricaciones en las que lo necesitan; y otras cosas.
La rueda: Para transportar, desplazarse, llevar cargas, norias, poleas, y un sinfĂn de buenas utilizaciones, y otras cosas.
La dinamita: Para abrir minas, tĂșneles, canales y otras cosas.
El petrĂłleo: Como fuente de energĂa, para lĂĄmparas, combustible y otras cosas.
La energĂa atĂłmica o nuclear: Como fuente de energĂa, productor de electricidad y otras cosas.
En fin cosas buenas se podrĂan, se pueden y se podrĂĄn hacer, la cuestiĂłn es querer otras cosas.
QuizĂĄs el presidente no haya convocado elecciones para julio, quizĂĄs el PP no haya ganado las elecciones de mayo, quizĂĄs los precios no hayan subido, quizĂĄs tampoco hayan bajado, quizĂĄs no haya habido COVID...
Como dirĂa la famosa y "superversionada" canciĂłn de Osvaldo FarrĂ©s; QuizĂĄs, quizĂĄs, quizĂĄs.
Os dejo esta magnĂfica versiĂłn de Andrea Bocelli.
No hay comentarios:
Publicar un comentario