Esta Ley, la Ley Campoamor, está basada en un poema de Ramón de Campoamor, poeta asturiano que dice...
"En este mundo traidor,
nada es verdad ni mentira
todo es según el color
del cristal con que se mira".
Por eso, me resultas imprescindible y sería un calvario vivir sin tí; si despierto al alba y no me acuerdo de tu compañía, malo; si durante la mañana en ningún momento disfruto de un rato contigo, peor; pero si al llegar la noche, no he tenido la oportunidad de contar ni un minuto con tu presencia,ni compartirte con ningún familiar, amigo o persona, entonces es que realmente ha sido un día perdido.
Mi vida te necesita para vivir, soy otro cuando me besas en la boca y me trasmites esa placidez que destilan tus labios; no es casualidad que me hayas curado muchas veces, no es el azar el que ha decidido que me ayudes en momentos de "bajona", en ratos de pérdida de fe en la gente, en instantes de tristeza; solamente verte venir por el pasillo acercándote, provengas de donde provengas, la mayoría de las veces hace en mí mejor efecto que una medicina.
Ya hace tiempo que decidir ver la vida a través del cristal de una sonrisa, y hacer a los que me rodean, que me vean siempre a través de ese mismo cristal, parezca yo lo que parezca, por la refracción que pueda producir el vidrio en mi imagen; me siento bien, y según dicen los doctores, es la mejor manera de tener una larga vida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario