Las
letras de las canciones, al igual que las poesías, son casi siempre, y ojo,
digo casi siempre, ficticias. Amores, desamores, llantos, penas, alegrías,
bellezas, piropos, experiencias personales, y un largo etcétera; ahora, eso sí,
si todo parecido con la realidad, es pura coincidencia, también hay que
determinar que la realidad, supera algunas veces, al mil por cien a la ficción.
Una
de esas canciones, que por ser de ficción, es superada superlativamente por la
realidad, es la dedicada a la vida por Julio Iglesias. La vida sigue igual. Me
vais a permitir que parafrasee la letra adaptándola a nuestro quehacer diario……
Unos
nacen, otros mueren, unos ríen, otros lloran. Amores que nos inundan sin cauce,
ríos de lágrimas que no tienen mar, penas, glorias, guerras, paz….. el yin y el
yan.
Siempre
habrá alguien por quién te merezca la pena vivir, siempre habrá alguno o
algunos por quien te merezca la pena luchar. Lo único que quedará serán tus
obras, porque al final te irás. Y el que venga detrás seguirá construyendo este
mundo basándose en las obras de los demás.
¡Qué
fácil es llamar a la gente amigos!, y que pocos amigos hay. Si estás en la
cresta de la ola y triunfando, te salen amigos a manojitos. Pero ay, “amigo”,
como caigas en desgracia, las primeras que abandonan el barco cuando se hunde,
son las ratas. Sólo quedan los que de verdad se hayan comido una
arroba de sal contigo (definición de amigo, diferente).
Siempre
habrá alguien por quién te merezca la pena vivir, siempre habrá alguno o
algunos por quien te merezca la pena luchar. No dejéis de luchar nunca, aunque
no haya nadie más que vosotros mismos por quien luchar; no dejéis que la vida
siga igual, procurad haced obras que cambien la forma de malvivir, y por
lo demás..... vivid.
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