No obligues a nadie a quererte, mejor oblígalo a irse. Quien insista en quedarse, es quien realmente te quiere. Siempre seremos para alguien, la persona correcta que conocieron en el momento equivocado.

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08 junio 2021

SMOKE ON THE WATER (Humo sobre el agua)

"Smoke on the water" es un "pepino" (como dicen ahora los jóvenes) de canción.
Este single fue grabado en diciembre de 1971 y salió al mercado en 1972 de la mano de la banda de hard rock "Deep purple" en su álbum "machine head"; y está ubicada en el número uno de la lista de las 50 canciones de hard rock más importantes de la historia. En 1972 se versionó y grabó de nuevo en el disco Made in Japan, en directo, del mismo grupo.
La canción cuenta la historia de un incendio en el castillo de Montreux el 4 de diciembre de 1971 durante una actuación de Frank Zappa, por una bengala que arrojó un espectador hacia el escenario.
Un par de años después, y no por una bengala en sí, sino por la machada de emular a los chicos del Instituto San Isidoro que lo hacían, empecé a fumar; nunca pensé que sería tan determinante el enganche que supondría el tabaco, jamás pensé que el cigarrillo me acompañaría en todos los momentos importantes y no importantes de mi vida desde ese instante.
Cuando salía con amigos (aunque me tuviera que esconder el pitillo en el bolsillo de la trenca cuando veía venir a mi padre, que supongo que no era tonto); si estábamos en casa de Enrique con el grupo musical (germen de los Escarabajos), cuando salía del instituto, en mi puesto de trabajo, tanto de botones, como de auxiliar, en el terminal de datos, como oficial, como subdirector y como director, en todos los cargos que tuve en el banco me tuvo que acompañar el puto tabaco.
El humo estaba sobre todo, sobre la mesa del comedor, sobre el local de ensayo, sobre la mesa del despacho, sobre el agua de la piscina, sobre el agua del suelo cuando llovía e incluso sobre el agua del mar.
El humo inundaba mis pulmones y los pulmones de los que conmigo compartían la vida, y si durante la semana se sobrellevaba porque te entretenías con el trabajo, los fines de semana era horrible, encendías al mismo ritmo que entre semana pero esos no se los fumaba el cenicero, te los fumabas tú.
Probé la pulsera con impulsos que pulsabas cuando tenías ganas, una semana; las pastillas zyntabac, un par de meses; el libro "Es fácil dejar de fumar", y una mierda.
Un día, bendita sea la hora, tal como hoy de hace once años, fui a la consulta del psicólogo Manuel Bosque a San Juan de Aznalfarache, y eso si fue santa medicina.
"Desde esa tarde, hoy hace once años el humo sobre el agua solo es bruma."
Un abrazo fuerte a los que estén intentando dejarlo, os digo que no trae nada bueno; ¡Mucho ánimo!

Foto extraída de la página: freeimages.com




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