No obligues a nadie a quererte, mejor oblígalo a irse. Quien insista en quedarse, es quien realmente te quiere. Siempre seremos para alguien, la persona correcta que conocieron en el momento equivocado.

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23 septiembre 2019

TENGO SED.

Juan: Capítulo XIX Versículos 27-29.
"Después, sabiendo que ya estaba todo cumplido, y para que la Escritura se cumpliera hasta el final, Jesús dijo:
- ¡Tengo sed!
Había allí un recipiente lleno de vinagre, empaparon en él una esponja, la ataron a una rama de hisopo y se la acercaron a la boca.
Después de beber el vinagre, dijo Jesús:
- ¡Todo se ha cumplido!
E inclinando la cabeza, entregó su espíritu".
Siempre, cada vez que escuchaba este fragmento del Nuevo Testamento, pensaba que los judíos eran tremendamente malos, malvados, malignos, perversos y mucho más; a un hombre brutalmente crucificado, flagelado con más de doscientos o trescientos latigazos ( y de los romanos), tenían la desfachatez de darle vinagre e hiel, como dicen otros, para producirle todavía más suplicio; pues nada más lejos de la realidad.
Descubrí la verdad leyendo la novela "Caballo de Troya" de Juan José Benítez, más conocido por J.J.Benítez.
Después busqué para cerciorarme que era verdad lo expresado por el navarro y encontré esto:
Antes de la crucifixión se le ofrecía una copa con una mezcla medicamentosa de vinagre, hiel y mirra para aliviar el tormento, cosa que Jesús rechazó, y más tarde, los romanos le empaparon un hisopo con una esponja empapada en vino agrio (mal traducido por vinagre) o como la llamaban los romanos "posca" , de la que sí bebió.
Ni una cosa era tan mala, y tampoco se supone que fuera vinagre tal cual como nosotros lo conocemos, por lo que en las escrituras no está bien delimitado este, al igual que otros muchos pasajes, al traducirlos literalmente.
Los que sí realmente tienen sed, son esos pequeños de color, que beben arriesgando sus vidas en las charcas cenagosas, porque no tienen ni una gota de agua dulce que echarse a la boca; y eso sí que no tiene ninguna explicación lógica, ni tampoco ninguna mala interpretación, el mundo civilizado es más malvado que los judíos y los romanos juntos.
¿O no?







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