En este caso José María Iribarren, en su libro: El por qué de los dichos, se refiere a esta frase hecha tan popular, cuyo origen procede de una antigua diosa romana llamada Ocasión, y que era representada como una hermosa mujer colocada sobre una rueda y con alas en la espalda o en los pies.
Con este simbolismo se pretendía reflejar que las oportunidades (las ocasiones) pasan de forma rápida.
Además, esta diosa Ocasión tenía una rareza en su cabeza, pues mientras en la delantera tenía un buen mechón de pelo, en la parte de atrás de la cabeza era calva.
De esta forma explica la mitología cómo es imposible coger las oportunidades por los pelos una vez que hayan pasado.
A esta diosa Ocasión, también se le llama Oportunidad en la mitología, y además de todo lleva un cuchillo en la mano, para que el afectado/a, cuando ella llegue, tenga la ventaja de poder romper las ataduras que lo tengan amarrado, y así aprovechar la visita de la diosa.
Las alas de los pies o espalda y la rueda, quieren representar la velocidad a la que pasa esta Ocasión.
"O" (situación frontal) y "cadere" (ocurrir, suceder).
De ahí proviene el nombre de la famosa Diosa del poco pelo.
Así que, en el momento que a una ocasión la pinten calva, no hay más remedio que cogerla por los pelos que le sobresalen de la frente y aprovecharla todo lo posible.
Revista Levante, el mercantil valenciano inspiró este comentario.
 |
| DIOSA OCASIÓN CON POCO PELO. |
No hay comentarios:
Publicar un comentario