El título de esta entrada tiene un triple o cuádruple punto de vista, y me explico:
Si lo hubiera titulado: "Sálvame de tele-5" sin coma, estaría titulándola como muchos de nosotros pensamos, que el destino no salve de Tele-5, porque la cadenita tiene cojones.
Pero no, lo he puesto con coma intencionadamente para hablar hoy de: Sálvame, de la cadena:Tele-5.
Quiero hablar hoy de este programa tan cítrico, que airea los bajos fondos de las personas que van a vender su dignidad por un puñado de euros, para intentar comprender porqué tiene la audiencia que tiene, y porqué lleva el tiempo que lleva en antena.
Y he llegado a una conclusión...
Este programa, aparte de sus espectadores incondicionales que disfrutan con el morbo de ver cómo hacen sufrir a los famosos en la ruina, o a los famosillos que quieren hacerse con dinero, engloba también a los televidentes que están verdaderamente hartos de los insulsos programas de las otras cadenas; esas cadenas que creen que todo lo van a arreglar con concursos, algunos infumables, y otros más pasados de moda que el añorado "Un, dos, tres, responda otra vez.
Hace poco se estrenó una nueva versión de "¿Quién quiere ser millonario? Famosos; y anoche abrió sus ojos el: ¡A jugarrrr! del "Precio Justo".
Y lo más lamentable es que todos los concursos los tienen que presentar los mismos presentadores, como si no hubiera más en el mundo de la televisión.
El cuarto punto de vista es que apaguemos la televisión, salgamos a tomar una cerveza, ahora que se puede, leamos un libro, escuchemos música de la buena, y por qué no, hablemos un poco con nuestra pareja o con nuestros hijos.
Creo que de todos éste es el mejor punto de vista.
En fin, que cada uno haga lo que le venga en gana.
Si lo hubiera titulado: "Sálvame de tele-5" sin coma, estaría titulándola como muchos de nosotros pensamos, que el destino no salve de Tele-5, porque la cadenita tiene cojones.
Pero no, lo he puesto con coma intencionadamente para hablar hoy de: Sálvame, de la cadena:Tele-5.
Quiero hablar hoy de este programa tan cítrico, que airea los bajos fondos de las personas que van a vender su dignidad por un puñado de euros, para intentar comprender porqué tiene la audiencia que tiene, y porqué lleva el tiempo que lleva en antena.
Y he llegado a una conclusión...
Este programa, aparte de sus espectadores incondicionales que disfrutan con el morbo de ver cómo hacen sufrir a los famosos en la ruina, o a los famosillos que quieren hacerse con dinero, engloba también a los televidentes que están verdaderamente hartos de los insulsos programas de las otras cadenas; esas cadenas que creen que todo lo van a arreglar con concursos, algunos infumables, y otros más pasados de moda que el añorado "Un, dos, tres, responda otra vez.
Hace poco se estrenó una nueva versión de "¿Quién quiere ser millonario? Famosos; y anoche abrió sus ojos el: ¡A jugarrrr! del "Precio Justo".
Y lo más lamentable es que todos los concursos los tienen que presentar los mismos presentadores, como si no hubiera más en el mundo de la televisión.
El cuarto punto de vista es que apaguemos la televisión, salgamos a tomar una cerveza, ahora que se puede, leamos un libro, escuchemos música de la buena, y por qué no, hablemos un poco con nuestra pareja o con nuestros hijos.
Creo que de todos éste es el mejor punto de vista.
En fin, que cada uno haga lo que le venga en gana.
Y lo de la foto no tiene precio; ¿Sería el quinto punto de vista, quizás?. No quiero ni pensarlo.
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| Foto extraída de la página: elespañol.com |
Yo me salvo porque me es imposible ver ese tipo de programas. Casi no veo la tele. Alguna serie que me interese y el tiempo, porque a estas alturas, ni siquiera los noticiarios se merecen mi tiempo.
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