Descendiendo de un avión procedente de Brasil, se comprende
hasta dónde llega la indiferencia hacia los perdedores, aunque sean
tricampeones……
Siempre pasa lo mismo, puedes
estar haciéndolo bien durante toda una vida, te equivocas, pierdes en el juego
de la vida, y todo lo anterior ya no te vale de nada, a la vista de los demás.
Sufres el abandono de los que,
hasta ese momento, eran incondicionales a tu causa, incluso, si aparte de ello
te retiras en ese mismo momento, pasas a formar parte ipso facto de la memoria
del olvido.
Los perdedores, siempre son
denostados, aunque hayan ganado mucho anteriormente; gente con buenos negocios,
que les fue mal y fueron abandonados, personas con muchos amigos, que se
esfumaron cuando las cosas no fueron bien, líderes que eran seguidos por
millones de personas, y que de la noche a la mañana mutaron a ogros malignos
(lo fueran o no lo fueran) siendo denostados hasta la saciedad; palmadas en la
espalda que volaron como golondrinas, cuando el peso de fracaso se instaló en
esas espaldas.
Los perdedores, deberían ser
bastante más respetados de lo que son; como dice George Elliot: Cualquier
cobarde puede luchar en una batalla, cuando está seguro de ganarla; pero
muéstrame al hombre que tiene agallas para pelear, cuando está casi seguro que
va a perder.
Deferencia con los perdedores,
porque todos, en algún momento de nuestra vida, hemos sido, somos, o seremos
perdedores.
Nadie gana de por vida, eso es lo
que me queda realmente claro.
Buenas noches, y luminosos
sueños.
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