¡No sé qué coño le hacen a algunos y a algunas por la mañana, para que desde que abren los ojos, estén encabronados!
No entiendo lo que unos y otras desayunan (si lo hacen) para que desde muy temprano estén protestando por todo.
Desconozco que bicho les pica antes de levantarse, para que se enfurruñen en la parada del autobús, para que le protesten al conductor para que no abra la puerta, si no hay nade, porque entra mucho frío; devuelven el café porque está demasiado frío, o demasiado caliente comentando: Joder Manuel, llevo años ya desayunando aquí, y todavía no sabes cómo quiero el café; entrar en el trabajo y no dar ni casi los buenos días.
No se, no entiendo porqué hay tanta gente encabronada por la mañana temprano.
No comprendo como las personas podemos ser tan negativas; esa forma de actuar no solamente pone de manifiesto la poca educación del interfecto o la interfecta, sino que implica un contagio directo y manifiesto de ese encabronamiento a muchas de las personas con las que este individuo o individua tenga relación durante el día.
La violencia, llama a la violencia; el amor, llama al amor; la simpatía, llama a la simpatía; y por ende, la gilipollez, llama a la gilipollez.
Los demás no tienen la culpa de lo que te pase, y si quieres estar encabronado, miráte al espejo, y págalo con el de enfrente, no con el resto de los humanos.
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