Cada vez que me miras por encima
del hombro, me gustaría ser tú. Cuando asoma ese desprecio en tus ojos, me
gustaría seguir siendo tú. Si de tus labios sale como una daga, un insulto o
una mentira, sigo queriendo ser tú.
Si quieres utilizar mi amistad,
para aprovecharte, quiero ser tú. Si abandonas a alguien (persona o animal)
después de sacarle el máximo jugo para tu uso o disfrute, también quiero ser
tú.
Si me besas, pensando en otra
persona, quiero ser tú; si me esclavizas como jefe, quiero ser tú, si me
maltratas, por el simple hecho, de ser físicamente más fuerte que yo, también
quiero ser tú.
Si me arrinconas en el olvido,
desearía ser tú; si mal-riges mi destino, sentado en una poltrona, en la que yo
te he puesto, viviendo a cuerpo de rey, me encantaría ser tú; si no entiendes,
que la vida, es para vivirla y no para putearla, quisiera ser tú.
Si no entiendes, que mis
recursos, no son para tu gozo particular, quisiera ser tú.
Me gustaría ser tantas veces
tú…., porque si no, me resulta imposible entender el por qué de tu conducta;
también, y sin que sirva de precedente, me deleitará, que alguna vez que otra,
quisieras ser yo. “A ver si así se te abren los ojos”.
En hora de elecciones sería un buen lema para los candidatos:
¡Quisiera ser tú,(señalando con el dedo), déjame que sienta tus necesidades e intente cubrirlas!
Tomamos nota.
En hora de elecciones sería un buen lema para los candidatos:
¡Quisiera ser tú,(señalando con el dedo), déjame que sienta tus necesidades e intente cubrirlas!
Tomamos nota.
No hay comentarios:
Publicar un comentario