LA LEALTAD.

Hoy, se me ha venido a la memoria una persona, que fue quien más me enseñó del mundo de la tauromaquia, y por ende también su hijo, uno de mis mejores amigos.

Es difícil ser fiel a una persona durante toda una vida, resulta arduo, mantener una amistad durante años y años, aguantando defectos y disfrutando virtudes.  Es duro, ser seguidor de una creencia religiosa durante una existencia, es bastante complicado ser honesto a la verdad, es complicado, incluso, ser fiel a uno mismo.
Para todo esto, sólo hay que tener una virtud en tu comportamiento.
Es difícil ser leal porque tienes que renunciar a tu propio ego para respetar el ego del de enfrente.

Pero lo doloroso es cuando tienes que poner a prueba la lealtad de los que te rodean, hijos, padres, parejas, amigos, compañeros de trabajo, etc.

Y en este caso entran en juego muchas otras cosas además de la lealtad...

Entran en juego el dinero, el amor, la atracción física, la psíquica, los intereses creados, el ansia de ascender, el ego particular, y tantas y tantas cosas más.

Mantener la lealtad a capa y espada, dadas todas las personas y cosas que nos atacan a diario, es sumamente complicado, tropezamos a diario con tentaciones que nos engolosinan la existencia.

"Feliz aquel que en las cosas de este mundo no se ve obligado, por los azares de la vida, a poner a prueba la lealtad de su prójimo. (Ibn Hanz, Córdoba 994 - Huelva 1064)"

Foto extraída de la página: gestionpro.com