No obligues a nadie a quererte, mejor oblĂ­galo a irse. Quien insista en quedarse, es quien realmente te quiere. Siempre seremos para alguien, la persona correcta que conocieron en el momento equivocado.

Seguidores

03 mayo 2018

HASTA LAS CAVIDADES MÁS PROFUNDAS.

Caminabas hasta las profundidades mĂĄs recĂłnditas de mi carne; eso si, cuando tenĂ­a la oportunidad de recibirte tranquilo y relajado.
Eras un bĂĄlsamo de serenidad en momentos azarosos, o sauna humeante en los ratos de relax. Cuando te convertiste en tabĂș, te tenĂ­a que admitir a escondidas, y eso suponĂ­a que te adentraras en mis abismos demasiado aceleradamente; salĂ­a a la puerta y al tenerte que recibir, todo pasaba tan rĂĄpido que hasta me mareaba tu presencia.
En otros tiempos, cuando me podías acompañar, servías para enamorar a las chicas con tu halo que me rodeaba durante la noche, de regreso a casa te entremezclabas con la neblina nocturna.
Eras como el aire que respiraba, como esa bocanada fresca de la mañana, como esa copa de aguardiente o coñac para entrar en calor; algunas veces hasta me dolían mis entrañas en demasía al recibirte.
HabĂ­a ratos, querida y olvidada amiga, que desaparecĂ­as en mi interior y no devolvĂ­as tu vaho nĂ­veo; ese, se perdĂ­a para siempre en lo mĂĄs profundo de mi ser.
Ahora bien, por esas paradojas que tiene nuestra lengua, te pueden comparar con una gran mojada de agua, un chaparrón que te cayera encima y te pillara sin paraguas; o traspasar una pared hacia el otro lado del tabique con el taladro; pero debéis comprender que no es lo mismo. De verdad que no es lo mismo y los que fumåis o habéis fumado lo sabéis igual que yo; o si no buscad en el diccionario de la RAE "calada".

No hay comentarios:

Publicar un comentario