No obligues a nadie a quererte, mejor oblígalo a irse. Quien insista en quedarse, es quien realmente te quiere. Siempre seremos para alguien, la persona correcta que conocieron en el momento equivocado.

Seguidores

10 octubre 2019

RIMERO.

Esta palabra me apareció el otro día en un crucigrama y me decidí a estudiarla; proviene de "rima" que a su vez deriva del occitano antiguo del siglo XIII "rim" y que a su vez emana del latín "rhithmus" que significa: ritmo.
No se si por su relación con la rima, que al fin y a la postre es una serie de versos puestos unos encima de otros, rimero significa más o menos eso: Un conjunto de cosas puestas sin orden unas encima de otras.
No es necesario decir la cantidad de rimeros que podemos observar a diario, en nuestro día a día, en cuestión de negligencias, dejadeces, errores, y falta de profesionalidad; también hay cantidad de rimeros de indeseables e "indeseablas" que se montan diariamente en un coche para que los que van por su sitio, los que respetan las normas, los que obedecen las señales no tengan más remedio que empezar su jornada con un cabreo.
Cruzan las líneas continuas, se meten bastante más adelante de lo que les corresponde entrar, teniendo el resto (que guarda fielmente la distancia de seguridad) que frenar a destiempo para evitar un accidente; aparcan donde les sale de la punta del "rimero" para que los niños se bajen del coche y entren en la escuela sin tener que andar ni un paso; interrumpen el tráfico para girar en un sitio en el que está literalmente prohibido; te pasan por la derecha al doble de velocidad a la que tú vas; en fin...
Todas las mañanas me encuentro con un rimero de "gilis" que no hacen otra cosa, aparte de intentar llegar antes que nadie, que incendiar el comienzo de la jornada laboral de muchos, que ya están bastante jodidos por tener que madrugar.
¿Por qué no les cae a esta gente un rimero considerable de multas?
Como diría Felipe Segundo en su cuarteto: ¡Ajolá! A ver si así aprenden.

No hay comentarios:

Publicar un comentario