Loa antiguos judíos ya colgaban con una soga por el cuello a los blasfemos, los idólatras y a los cadáveres de los criminales, según los historiadores. En Roma, sin embargo, lo habitual era castigar al reo izándolo de los pies y poniéndole unas pesas en los brazos. Así, por ejemplo, San Antonio de Nicomedia fue atado por un brazo y San Gregorio de Armenia por un pie. En la Galia, los esclavos eran colgados por el cuello de los árboles que se consideraban estériles y estaban consagrados a las divinidades infernales, como el olmo.
Esta forma de ejecución también se mantuvo en la Edad Media, pero fue en el siglo XVIII cuando se impuso la horca. La gente acudía a los ahorcamientos públicos como quien va al cine.
La pena de horca, también conocida como pena capital,
sigue siendo legal en varios países a pesar de ser considerada una práctica
cruel e inhumana por organizaciones internacionales. Algunos países donde
la pena de horca se aplica actualmente incluyen a:
Prácticas de hace más de veinte siglos que siguen vigentes en algunas partes del mundo.
![]() |
Foto de mi amiga Juani Mora. |
No hay comentarios:
Publicar un comentario