VIVIR O MORIR.

¿Qué determina para quién, qué es vivir, y qué es morir?

Me explico...

¿Vive la persona que esta esclavizada, que pasa hambre, que está tirada en la calle, los gorrillas de las plazas de aparcamiento en las ciudades, los drogadictos, los enfermos encamados de por vida, los tetrapléjicos, los enchufados a una máquina de latidos o respiradora?

¿Mueren los enamorados, los que sueñan todo el día, los que se entregan a los demás, los que dan su vida por otros, los que son parapetos de abusos, los que se ponen por delante para evitar que te dañen?

¿Se puede vivir nadando en la envidia, con el entrecejo siempre fruncido, y despotricando continuamente de la gente que te intenta hacer el bien?

Habrá que aprender a vivir, habrá que hacer borrón y cuenta nueva a nuestros intereses creados, a nuestras costumbres insanas, a nuestros miramientos innecesarios; aprenderemos a decir "no", entenderemos el secreto de la vida, asimilaremos que esto, más tarde o más temprano se acaba, y recordaremos que lo que hayamos vivido a nuestro gusto, felices, será solo la vida que hayamos vivido.

¡Vivamos!; es decir:

Amemos, besemos, escuchemos, miremos, toquemos, sintamos, embriaguémonos y soñemos.

Y después muramos; es decir:

Callemos, quedemos ciegos, abstengámonos, parémonos, olvidémonos, resignémonos y esperemos.

Foto extraída de la página: lad.fm